jueves

Aeroblus volvió a encontrar la luz


Aeroblus volvió y demostró porque es una de las bandas que, a pesar de su escasa trayectoria, se transformó en uno de los pilares del rock nacional. La banda tocó después de 33 años y lo hizo en el Teatro de Flores. Su regreso genera ilusión en miles de personas, que piensan que el rock está mermando en calidad, respecto de los últimos años.
El trío que formó Pappo junto a Alejandro Medina en el bajo y Rolando Castelo Junior en batería en mayo de 1977, fue el nudo que unió el fin de Pappo´s Blues y el comienzo de Riff, en la carrera del guitarrista fallecido en 2005. Aeroblus grabó un solo CD, que es considerado por muchos como una perla en la carrera del Carpo y (por motivos de la vida misma) no se pudo disfrutar durante muchos años.
Pero un día ya sin Napolitano, pero con Nápoli uniéndose a los otros dos miembros originales, Aeroblus volvió a la luz y tocó en El Teatro de Flores. El “Chizzo” de La Renga fue el elegido para suplir la ausencia no deseada de Pappo, cargándose la guitarra y poniéndole su voz tan particular y potente a algunos temas, mientras que del resto se encargó Medina.
El arranque fue potente y los músicos salieron con los tapones de punta con “Aeroblus” y el “vamos a buscar la luz” del estribillo, que no se registró presente que no lo cantara. Luego se sucedieron “Solísimo”, “Completamente nervioso”, “Árboles difusores”, “Vine cruzando el mar” y “Aire en movimiento”, para demostrar que la banda nunca tendría que haber dejado de sonar en vivo.
Además de los temas de la banda, se colaron clásicos como “Salgan al sol” de Billy Bond y la Pesada y “Desconfío” de Pappo´s blues, tema donde el público no pudo evitar exclamar el “no murió, Pappo no murió”.
El tributo estuvo cargado de emociones y se percibía un dejo de nostalgia por parte de los músicos y del público, que se mezclaba entre aquellos que tuvieron la oportunidad de ver al trío original arriba del escenario en los últimos años de la década del ´70, y aquellos que fueron a ver luego de mucho tiempo al Chizzo. Esos mismos que están deseosos de volver a apreciar otro recital de la banda de Mataderos, y que esperan aún más por un nuevo CD. Tal es así que uno de los cantos que más se escuchó fue “el que no grita La Renga para que carajo vino”. Tanto pidieron los fans que tuvieron su regalo final, cuando se subieron el Tete y el Tanque para acompañar al cantante en “Panic Show” y todo se “derrumbó” al escuchar el inicio con “Hola a todos yo soy el león”.
Todo se terminó a las 23.45 a pesar de que nadie (ni los propios músicos) quería dejar su lugar y así poder seguir disfrutando de una de las mejores bandas que entregó nuestro rock. ¿Será el comienzo del retorno de Aeroblus?